Esto llamado tan caóticamente “autoayuda” suele ser, como
término para definir el contenido, un completo dislate. Esa es mi opinión,
después de ver cómo puede ser considerado “autoayuda” desde lo más parecido a
la psicología, donde entra el mismísimo Jung, o el disparate new-age más
delirante, con extraterrestres místicos por medio y, eso sí, mensaje redentor.
Dirán algunos: ¿a quién se “autoayuda”, a uno mismo o misma, o a las ventas del
autor?; pues, oye, a veces me lo he planteado y soy de la convicción personal
de que “de todo hay en botica”…, en botica de “autoayuda”, claro.
Por eso me dan un pábulo de confianza los autores que dejan
sus obras volar en la red cibernética, al completo y sin condiciones, para la
libre lectura gratuita y la ayuda pública de quien guste y se arriesgue a
leerles.
Hoy presento, y pongo al alcance de mis
amigos de estas páginas, cuatro de esos libros. Son obras que me he leído y hasta he comentado en otras
ocasiones. No espero que se conviertan en vuestras lecturas favoritas (o sí),
ni afirmo que sienten cátedra de nada. No son infalibles, ni panaceas
milagrosas. Son solo señales que marcan caminos; caminos que quizás a alguien
le puedan servir, como me sirvieron a mí, para intuir otras posibilidades,
otras ideas, otra forma de enfocar esto tan difícil y tan sencillo a la vez,
que llamamos vida. Si queréis probar, solo tenéis que cliquear sobre el título y tendréis el archivo a mano.
Podéis elegir entre:
Los que me conocéis un poco sabéis que este libro no podía
faltar en mis recomendaciones. Previsiblemente, tenía que ser el primero que
recomendase. Sí, con Tolle a cuestas, porque con él descubrí esa otra realidad
de nuestro interior humano, sus luces y sus sombras, sin rigideces
encorsetadas.
Con algo tan básico y real como que no podemos vivir el
futuro hasta que se convierte en presente, ni retornar al pasado porque ya no
existe, Tolle postula la energía vital del momento presente, el ahora, y deja
al descubierto la trampa del “ego”, la mente analítica disfuncional que domina
la sociedad actual, sin ser advertida.
El viejo mensaje de las filosofías orientales, “aquí y
ahora”, toma sentido en sus sencillas palabras y da un giro de ciento ochenta
grados a la mentalidad occidental, estresada y manipulada durante siglos.
Abaladas por eminentes científicos, médicos y especialistas
en el estudio del cerebro humano, las teorías de El Poder del Ahora se reflejan
reales en numerosas investigaciones y en cómo están siendo admitidas y
utilizadas en diversas escuelas y terapias psicológicas, por ejemplo en la
terapia llamada Mindfulness.
Pero, su principal éxito, es el impacto que ha producido ya
en miles de lectores de todo el mundo, desde su primera publicación en 1997.
Sea cual sea la situación de vida que se atraviesa, este
libro no pasa inadvertido a ningún lector, ni deja indiferente. Como mínimo, su
enfoque deja abiertas las puertas del cuestionamiento y la propia conciencia.
En “Los cuatro acuerdos”, Miguel Ruíz empieza presentando a los naguales,
preservadores casi secretos del saber esotérico del pueblo tolteca, que enraíza
con el pensamiento espiritual más puro y universal: la necesidad del ser humano
de entender a los demás y de entenderse
a sí mismo, llegando a una serie de “acuerdos consigo mismo” que le reconcilien interior y exteriormente
con su realidad.
Para ello, propone incluir entre todos los “acuerdos” o
creencias personales, que cada uno acepta consigo mismo, estos cuatro que
pueden traerle la paz y sabiduría necesarias para enfrentar al mundo y sus
múltiples maneras de pensar y sentir.
Primer acuerdo- Ser Impecable Con Las Palabras.
En un mundo donde la comunicación se vuelve a veces un
marasmo de voces, gritos y confusión, se recomienda ser consecuente y prudente
con las propias palabras. Que el lenguaje no sea el arma que se alza y se lanza
contra los demás, juzgando y acosando. Que la palabra no sea el instrumento
soez que ensucia el alma, sino que sirva para transmitir lo positivo y ayude al
crecimiento espiritual y personal de quien pueda escuchar y de quien está
hablando. La palabra como instrumento de creación y no de destrucción.
Segundo acuerdo- No Te Tomes Nada Personalmente.
Con una prosa maravillosa y práctica, se nos dice de nuevo
lo que otras filosofías han recomendado tantas veces: la relatividad de la
verdad, el error de aceptar (estar de acuerdo) que lo que vemos, oímos o
creemos percibir del exterior como real es auténtico. Traspasar la
superficialidad de las palabras ajenas, para ver que no somos “el ombligo del
mundo” y que nada gira a nuestro alrededor, sino que somos, solo y nada
menos, una parte de ese mundo integrador
que llamamos vida.
Tercer acuerdo- No Hacer Suposiciones.
Abundando en los consejos anteriores, conseguir que la
palabra sirva para comunicar también las posibles dudas, malos entendidos o interpretaciones sobre lo que los demás
transmiten, antes que quedarnos (acordar con uno mismo quedarse) con una
percepción propia que nos indispone con los demás o emite juicios equivocados.
Apartar lo que nuestra mente dice y discute sobre lo que el otro ha querido
decir y tener la valentía de preguntar, conciliar y aclarar.
Cuarto acuerdo- Haz Siempre Lo Maximo Que Puedas.
Este cuarto acuerdo permite ser fiel a los otros tres: si
haces siempre lo mejor que puedes hacer, cuidarás lo que dices, lo que piensas
y no te dañará lo que dicen y lo que piensan de ti. Darás lo mejor de ti, en la
medida en que puedas en cada momento, sin esfuerzo ni sufrimiento, sin juzgarte
ni culpabilizarte, porque estás haciendo lo que sientes que puedes hacer.
Este libro es una auténtica sorpresa, empezando por que no
lo encontraréis en librería alguna, ni digital ni material. Es un obsequio del
autor a todos los lectores de la página donde ofrece su otro libro, "Meditación
Fluir para Serenar el Cuerpo y la Mente", los beneficios del cual,
anuncia, dona íntegramente a las ONG’s
Acoes (que se dedica a la atención educacional de niños y mayores en Honduras)
y Entreculturas (que facilita el acceso a la educación a personas del tercer
mundo).
Pero es que, Relajación Física y Serenidad Mental, es el
testimonio en primera persona de su autor, profesor del Departamento de
Psicología Evolutiva y de la Educación de la Universidad de Almería, y enfermo
de depresión desde los veinte y pocos años, que narra de forma sincera y
natural su odisea para librarse de la ansiedad y la depresión. Su vida, su padecimiento interior, sus anhelos
y sus torturas mentales, sonarán muy familiares a más de un lector o lectora.
Y, lo más importante, desvela poco a poco los pasos que le condujeron a cambiar
su vida de sufrimiento e insatisfacción por tranquilidad y alegría. Un canto a
la esperanza para muchas personas
estresadas y angustiadas, sin entender porqué. Y el relato sin tapujos de un
hombre valiente.
Viktor Frankl vivió durante dos años y medio en cuatro campos de concentración y exterminio
nazis. Como declara en su libro “El hombre en busca de sentido”
(originariamente, “Un psicólogo en el
Campo de Concentración”), en ese tiempo su motivación para sobrevivir era
reencontrarse con su esposa, con la que llevaba solo nueve meses casado, sus
padres y sus hermanos; todos ellos murieron durante sus confinamientos, pero él
sobrevivió por ese sentido último que dio a su vida.
Sin embargo, pese a las penurias, humillaciones o
injusticias vividas y presenciadas, Frankl no perdió ocasión de observar como
psicoterapeuta el comportamiento humano de prisioneros y verdugos, evaluando
sus reacciones ante la adversidad y utilizándolas en ayudar a levantar la
última libertad que le queda a la persona despojada de todo valor: la libertad
de elegir qué actitud tomar ante ciertas terribles circunstancias.
Como Viktor Frankl descubrió y proclamó, el ser humano
necesita, ante todo, un sentido para
vivir. Lo que tiene más sentido es la pasión del amor, entendido como valor; y
el amor que se expresa hacia afuera, en otras personas, objetos o hechos, no es
más que el amor por la propia vida. Lo que es igual: por uno mismo, no tanto
como cuerpo físico, sino como entidad espiritual, íntegra y completa.
Gracias por tu blog....has sido un gran aporte para la blogósfera
ResponderEliminarGracias a tí, por tu deferencia, Claudia :)
ResponderEliminarEspero seguir aportando algo positivo, aunque sea un poquito y para algunas personas.
También tus blogs me parecen interesantes, amiga.
Un beso.
Gracias, Lola. Los libros son de autoayuda y tu artículo qué es "artículo autoayuda con libros autoayuda" jajaja
ResponderEliminarY ahora en serio, está super bien, me ha gustado mucho la idea, ya que además de aportar información, ofreces la posibilidad con un solo clik de descargar el libro en cuestión.
¡Felicidades!!! gran aporte, como dice Claudia.
Besosss
No lo había pensado,pero tienes razón: ¡eso es rizar el rizo , "tocaya", generosa que es una! ;)
ResponderEliminarEn fin, con que sirva de ayudita o le guste a alguien más, ya me vale la pena.
Gracias por seguir ahí, Lola.
Besosss :)
Muchas gracias Lola por publicar esta entrada en tu blog, como muy bien dices son 4 de los mejores libros que cualquier ser humano puede leer.
ResponderEliminarYo añadiría a tu listado:
El silencio habla de Eckhart Tolle.
Silencio de Thich Nhat Hanh.
Terapia Espiritual de Ramiro Calle.
y El Proceso de la Presencia de Michael Brown.
Saludos.